Me da mucha hueva la política, y en general soy muy apático hacia lo que ocurre a mi alrededor. No obstante, es inevitable señalar algunos de los acontecimientos más importantes que ocurrieron en el año.
Primero, la alarma por la epidemia de influenza en Abril. Un pésimo manejo de la contingencia de parte del maldito gobierno provocó que la severa crisis por la que ya atravesábamos, se profundizara más. Le dieron en la madre a los restauranteros y a los hoteleros al ordenar el cierre por una semana . Fueron días grises, tristes, desolados.
En Noviembre tuvimos la lamentable farsa del personaje apodado ‘’Juanito’’. Como circo para entretener a las masas más incultas estuvo bien, pero por esas cosas es que la política mexicana me causa náuseas.
Continúa la tan sangrienta y mediática como inútil guerra contra el narco. En Diciembre fue cazado el capo Arturo Beltrán Leyva, en peliculesco combate nocturno en el centro de Cuernavaca.
En cuanto a mi pasión, el heavy metal, fue un año raro, en que la mayoría se acumularon a partir de Septiembre y provocaron una saturación de eventos, en parte a causa del brote de influenza que alejó a los visitantes extranjeros del país a mediados del año. Para destacar los siguientes:
- METALLICA, con tres conciertos en un Foro Sol a reventar. No importan sus horrendos discos noventeros, no importa que sean una sombra pálida de lo que eran; Metallica sigue llenado estadios con ese setlist de canciónes clásicas.
- KREATOR y EXODUS en el Circo Volador, dieron una cátedra de thrash old-school. Qué moshpit tan destructor.
- AMORPHIS y CHILDREN of BODOM, buen concierto para la horda de nuevos chavitos metaleros.
- El CHAS METAL ATTACK, con un cartel impresionante que traía a Grave, Toxic Holocaust y 1349. Lástima, no pude asistir.
- El MEZCAL FEST, gran evento que congregó a clásicos como Death Angel, Alcatrazz, Deicide, Testament y Voivod. Poco a poco nuestro país va adquiriendo cierto prestigio internacional para organizar festivales. Esperemos que así continúe.
- El primer EYESCREAM FEST, presentando a 3 Inches of Blood, Hatebreed y Shining. El del próximo año estará mucho mejor.
- Nos visitaron otros monstruos como AC/DC, OPETH y VENOM; consagrados como OVERKILL, ENTOMBED, MAYHEM, VITAL REMAINS, KATAKLYSM, SAMAEL y TIAMAT; grupos semi-mainstream como EPICA, e IN FLAMES, y bandas no tan conocidas en México como HATE, DESTROYER 666, JIGAI e IMPIETY.
miércoles, 23 de diciembre de 2009
Balance 2009 Pt. 1, MI YO
De Enero a Marzo:
Demasiada calma, tanta que presagiaba tormenta. Un comienzo que pintaba para ser un excelente año. Mi relación iba viento en popa, y vivía a mis anchas en mi departamento de soltero. Me sentía totalmente feliz con la vida, pero fuera de ahí, nada especialmente trascendente pasó esos 3 meses.
De Abril a Junio:
La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida!! reza la canción. jajajaj Y como nuestra existencia está regida por la llamada Rueda del Samsara (vulgarmente conocida como la rueda de la fortuna), pues sucede que a veces estás arriba, y de repente ya no!!! En Abril empezaron algunas discusiones con mi querida novia, y el día 2 de Mayo repentinamente terminó todo. Caray, vaya días que pasé. Solo, en un departamento que me recordaba todo a ella; el que antes era mi rincón, mi guarida, de repente se volvió una cueva asfixiante. Los errores se pagan muy caros y esta vez no hubo perdón ni regreso, como solía ocurrir con mi anterior chica. Seguirían 2 meses de tortura mental y de la más horrenda depresión, pero ni modo, que siempre pasa así. Hay que ser fuerte.
En el mismo mes de Mayo recibimos en mi familia uno de los golpes más duros a los que hemos sido sometidos. Mi padre fue diagnosticado con cáncer de colon en estado avanzado. De repente el shock, la incredulidad. Los recuerdos, tu vida entera pasa delante de tus ojos, tu mente empieza a imaginar cosas y a construir dolorosas escenas futuras. No obstante, se mantuvo estable. Lo difícil vendría después.
De Julio a Septiembre
Se acabó mi breve experimento de vivir solo. La depresión por mi truene y el maldito deseo de comodidad para ya no tener que pagar tantas cuentas por mí mismo, me hicieron regresar a la casa de mi madre. Al principio fue muy difícil. De tener un departamento de 52 m2 para mí solo, pasé otra vez a un cuarto de 3x3 y a soportar el carácter de mi sacrosanta madre. Vaya cosa. Pero dentro de lo malo, lo bueno. Cambié de auto, con el dinero que dejé de pagar de renta volví a darme mis mezquinos lujos (Hacía mucho tiempo que no compraba tantos discos; nada más y nada menos 30 CDs originales pasaron a engrosar mi colección jejeje). Y por supuesto, siempre es reconfortante llegar de trabajar y que tu cena ya esté en la mesa y tu ropa lavada en tu cama. :)
En Agosto me reencontré con una ex novia, a la que amé mucho, como nunca creí hacerlo. No ocurrió mayor cosa que algunas salidas en plan amistoso. Lo que ya fue, no lo será otra vez.
Mi padre entró entonces en la etapa más difícil del tratamiento. Comenzó la tortura de las radioterapias y a finales de Septiembre, las quimioterapias. Con mucha fuerza de voluntad y el apoyo de toda la familia, todo marchó relativamente bien.
De Octubre a Diciembre
Después de la tormenta viene la calma. Superado el trauma del truene y del cambio de casa, llegó la relajación y el regreso a los antiguos vicios jajaja. Me atreví a entrar a una sesión de sexo grupal :0!!, y tuve además una sesión privada con 2 nenas. Fantástico. Si el cielo y el infierno existen en la Tierra, en ese momento pude tocar el cielo.
El amor tocó de nuevo a la puerta (y sigue tocando jejeje). Pareciera que la naturaleza acomoda las cosas sabiamente, porque en estos meses mi padre increíblemente está dejando atrás la enfermedad. En realidad nunca perdimos la esperanza, o simplemente bloqueamos los peores pensamientos. El chiste es que de un grado de 800 que tenía en Agosto, ahora está en sólo 30. Es algo que raya en lo milagroso. Doy GRACIAS a la fuerza omnipotente que mueve y rige el universo, y que comúnmente llamamos DIOS, y por supuesto gracias a mi familia por todo el apoyo brindado a mi padre.
En Noviembre se presentó la oportunidad dorada de la independencia definitiva, y no la desaproveché. Logré adquirir una modesta pero linda casa en la ciudad de Cuernavaca, y sólo el tiempo dirá que ocurrirá. ¿Cambiaré otra vez de lugar de residencia? ¿algo me espera allá? no lo sé.
Que venga el 2010. Lo espero con mucha motivación y fuerza.
Demasiada calma, tanta que presagiaba tormenta. Un comienzo que pintaba para ser un excelente año. Mi relación iba viento en popa, y vivía a mis anchas en mi departamento de soltero. Me sentía totalmente feliz con la vida, pero fuera de ahí, nada especialmente trascendente pasó esos 3 meses.
De Abril a Junio:
La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida!! reza la canción. jajajaj Y como nuestra existencia está regida por la llamada Rueda del Samsara (vulgarmente conocida como la rueda de la fortuna), pues sucede que a veces estás arriba, y de repente ya no!!! En Abril empezaron algunas discusiones con mi querida novia, y el día 2 de Mayo repentinamente terminó todo. Caray, vaya días que pasé. Solo, en un departamento que me recordaba todo a ella; el que antes era mi rincón, mi guarida, de repente se volvió una cueva asfixiante. Los errores se pagan muy caros y esta vez no hubo perdón ni regreso, como solía ocurrir con mi anterior chica. Seguirían 2 meses de tortura mental y de la más horrenda depresión, pero ni modo, que siempre pasa así. Hay que ser fuerte.
En el mismo mes de Mayo recibimos en mi familia uno de los golpes más duros a los que hemos sido sometidos. Mi padre fue diagnosticado con cáncer de colon en estado avanzado. De repente el shock, la incredulidad. Los recuerdos, tu vida entera pasa delante de tus ojos, tu mente empieza a imaginar cosas y a construir dolorosas escenas futuras. No obstante, se mantuvo estable. Lo difícil vendría después.
De Julio a Septiembre
Se acabó mi breve experimento de vivir solo. La depresión por mi truene y el maldito deseo de comodidad para ya no tener que pagar tantas cuentas por mí mismo, me hicieron regresar a la casa de mi madre. Al principio fue muy difícil. De tener un departamento de 52 m2 para mí solo, pasé otra vez a un cuarto de 3x3 y a soportar el carácter de mi sacrosanta madre. Vaya cosa. Pero dentro de lo malo, lo bueno. Cambié de auto, con el dinero que dejé de pagar de renta volví a darme mis mezquinos lujos (Hacía mucho tiempo que no compraba tantos discos; nada más y nada menos 30 CDs originales pasaron a engrosar mi colección jejeje). Y por supuesto, siempre es reconfortante llegar de trabajar y que tu cena ya esté en la mesa y tu ropa lavada en tu cama. :)
En Agosto me reencontré con una ex novia, a la que amé mucho, como nunca creí hacerlo. No ocurrió mayor cosa que algunas salidas en plan amistoso. Lo que ya fue, no lo será otra vez.
Mi padre entró entonces en la etapa más difícil del tratamiento. Comenzó la tortura de las radioterapias y a finales de Septiembre, las quimioterapias. Con mucha fuerza de voluntad y el apoyo de toda la familia, todo marchó relativamente bien.
De Octubre a Diciembre
Después de la tormenta viene la calma. Superado el trauma del truene y del cambio de casa, llegó la relajación y el regreso a los antiguos vicios jajaja. Me atreví a entrar a una sesión de sexo grupal :0!!, y tuve además una sesión privada con 2 nenas. Fantástico. Si el cielo y el infierno existen en la Tierra, en ese momento pude tocar el cielo.
El amor tocó de nuevo a la puerta (y sigue tocando jejeje). Pareciera que la naturaleza acomoda las cosas sabiamente, porque en estos meses mi padre increíblemente está dejando atrás la enfermedad. En realidad nunca perdimos la esperanza, o simplemente bloqueamos los peores pensamientos. El chiste es que de un grado de 800 que tenía en Agosto, ahora está en sólo 30. Es algo que raya en lo milagroso. Doy GRACIAS a la fuerza omnipotente que mueve y rige el universo, y que comúnmente llamamos DIOS, y por supuesto gracias a mi familia por todo el apoyo brindado a mi padre.
En Noviembre se presentó la oportunidad dorada de la independencia definitiva, y no la desaproveché. Logré adquirir una modesta pero linda casa en la ciudad de Cuernavaca, y sólo el tiempo dirá que ocurrirá. ¿Cambiaré otra vez de lugar de residencia? ¿algo me espera allá? no lo sé.
Que venga el 2010. Lo espero con mucha motivación y fuerza.
viernes, 18 de diciembre de 2009
Monstruosidad viviente
DEATH
Spiritual Healing, 1990
El tercer disco de DEATH, para mí un material muy adelantado a su época, que muestra el plano musicalmente siempre ascendente y la progresión que siguió Chuck Schuldiner, hasta su último disco Sound of Perseverance y su desgraciado fallecimiento en 2001.
Algo constante en Death fueron los cambios de personal en cada disco. En este caso, de la formación del Leprosy fue dado de baja el guitarro Rick Rozz, en palabras del propio Chuck por ‘'su falta de habilidad para tocar las canciones y porque su incapacidad me impedía avanzar como yo quería; el resto de la banda crecía musicalmente, él no’’. Su sustituto fue nada menos que el virtuoso James Murphy, y su aporte fue fundamental. Veamos...
Todo es una revolución en este disco, respecto a lo que Chuck había hecho haste el momento. En primer lugar, abandonó las letras huecas acerca de violencia, sangre, muerte, zombies, etc., para enfocarse a temas más críticos hacia la sociedad y la psique humana, que al final sería la línea que seguiría en sus posteriores trabajos. Aquí se tocan variedad de temas como el aborto (Altering the Future), la crítica a los falsos predicadores que se hacen ricos con la fe de la gente (Spiritual Healing, que además ilustra la portada), la drogadicción durante el embarazo que produce malformaciones fetales (Living Monstrosity), los mensajes en tus sueños para explicar y manejar tu vida (Within the Mind), la falsedad, la hipocresía y el materialismo de la gente (Low Life, Defensive Personalities), la biotecnología con fines perversos (Genetic Reconstruction), y un vistazo a la mente de un asesino serial (Killing Spree).
Y por supuesto el aspecto musical también está revolucionado. Las estructuras musicales son más controladas y complejas, aunque también aparece el aspecto melódico que en adelante desarrollará Chuck hasta el virtuosismo.
Los problemas con los demás miembros de la banda harían que este disco fuera el último con una alineación ‘'estable’’. De ahora en adelante Schuldiner compondría todo su material y sólo reclutaría músicos para grabar y hacer una gira.
Y como le gusta decir a mi amigo el Killer: ‘’un disco hermoso’’
Calif. 10
jueves, 10 de diciembre de 2009
Velocidades inhumanas
KRISIUN
The Conquerors of Armageddon
2000, Century Media
Primero que nada…si por la cruda, el estrés laboral, o si a causa de la menstruación, padeces dolores de cabeza, ALÉJATE DE ESTE DISCO COMO SI FUERA LA PESTE, porque tu dolor se acentuará.
El debut de los brazileiros Krisiun en las ligas mayores, al ser firmados por el sello Century Media, me confirma que no por tocar tan rápido que hasta tus tendones se madreen, ¡vas a sonar más brutal!!! Nueve tracks del death metal más caótico, malhechote y guarro que he escuchado jamás, aunado a las siempre saturadas producciones del ex Morbid Angel, Erik Rutan (nunca me ha gustado cómo trabaja este carnal en el estudio), dan como resultado un aborto de brutal death metal que me cuesta trabajo entender cómo es que un sello como Century aceptó lanzar.
Riffs planos y repetitivos, tan simples en su ejecución que hasta mi primita de 10 años los tocaría; una guitarra que no puede llevarle el ritmo a una batería que aunque va hecha madres, no hace un solo cambio de ritmo (eso sí, es simplemente admirable la velocidad de Max Kolesne detrás de ella, lo único bueno del disco, ¡pero debe controlarse un poco!!), una voz gutural poderosa, pero también plana…caos, desmadre fuera de sí, a la cuarta o quinta canción el entusiasmo desapareció y me dieron ganas de quitar el disco y no ponerlo más.
Velocidad a tope no necesariamente significa brutalidad, ni el death metal más complejo significa hacer puro ruido a lo pendejo. Si no, pregúntele a Nile o a Cryptopsy. Su caos es controlado, su música es brutal pero exquisita a la vez, casi como un ensamble sinfónico.
No obstante, Krisiun se superaría en años posteriores y nos regalaría excelentes trabajos como Southern Storm ó Ageless Venomous. Pero por lo pronto, a este primer intento serio no le doy más que un mediocre…6.5 de calificación.
sábado, 5 de diciembre de 2009
Treintañeros
Este año entré al club de los treintañeros. Mi rango de edad me ubica por lo tanto en la llamada Generación X y me pone quizás también en la antesala de la llamada crisis de la mediana edad.
Hablar de la generación X es hacerlo pensando en personas de entre 24 y 37 años. Ya no somos adolescentes, pero entramos en la categoría de ‘’adultos jóvenes’’. Soy parte de la primera generación que se crió con la ruptura verdadera del hogar tradicional. En la década del 70 al 80 el divorcio pasó a convertirse en una palabra cada vez más familiar ¿Eso qué implica? Pues entre otras cosas, que nuestros jefes nos dieron la llave de la puerta de casa desde pequeños; aparecieron los hogares uniparentales. Por primera vez dejaba de existir la idea de padre, madre, dos hijos, un perro, un gato y una cerca blanca rodeando el jardín. No las teníamos que arreglar solos. En mi caso, a mis padres sólo los veía unos minutos en la mañana y otros tantos en la noche. Tenían que trabajar de tiempo completo y mi abuela fue la que verdaderamente me crió. Sólo los fines de semana estaban disponibles mis viejos.
Crecí en un mundo decadente. He escuchado siempre cosas como éstas: Si comes alimentos grasosos, de adulto te dará cáncer; si vas a la playa, no te expongas a los mortíferos rayos UV. Ese enorme agujero en la capa de ozono nos iba a provocar cáncer de piel, pero aún no teníamos protector solar factor 30. El reciclaje no existía todavía. En todas partes se hacían cosas que dañaban el medio ambiente, y durante la década del 70 y principios de la del 80 la gente, de repente, comenzó a darse cuenta. Pero aún no había soluciones.
Crecí siempre con la amenaza de la muerte. Y no me hablaban de guerras mundiales, sino del peligro que acechaba en la calle, en la escuela, incluso en ni propia casa: Me enseñaron a no abrirle la puerta a ningún extraño; si vas a coger, cuidado con no ponerte condón, porque el embarazo no es el único peligro, también te puede dar SIDA; cuidado al cruzar la calle, fíjate antes a izquierda y derecha, y ya no juegues futbol en la calle con tus amigos, pues un auto puede pasar y atropellarte, o cuidado al caminar por ciertos lugares a ciertas horas, porque hay asaltantes. Miedo y amenazas por todos lados.
A los treintañeros se nos critica a veces por nuestra apatía y por no involucrarnos en hacer de éste un mejor mundo. Pero se equivocan, no es apatía, es sólo que en nuestro inconsciente los miedos a tantas amenazas se han quedado grabados, y pasamos demasiado tiempo tratando de manejarlos..
Soy parte de la última generación que jugó al avión, a los encantados o a las canicas, pero también fuimos los primeros en estrenar las nuevas tecnologías que hacían que te quedaras en tu cuarto a jugar en vez de salir a la calle: estrenamos el Atari y el Nintendo, y últimamente, hasta jugamos sin problemas el XBOX y el PlayStation.
Por desgracia soy parte también de la primera generación a la que no le fue mejor que a sus padres; A ellos les tocó la romántica época en la que el gobierno era la mejor opción para trabajar, que te daba buenas condiciones para vivir como clasemediero decente hasta tu jubilación. Eso permitía tener a los 30 años casa propia, auto de agencia, y sueldo decente. A los X obtener esas cosas se nos ha complicado mucho, y cuando lo logramos, muchas veces es a costa de contraer largas y pesadas deudas. Crecimos en medio de crisis económicas permanentes, así que aprendimos a esforzarnos porque nadie nos regalaba nada, ni los padres estaban en casa para ayudarnos. Crecí en la época del nomadismo laboral. Mi padre duró casi 20 años en una empresa, y 10 en otra. Para los X durar 5 años trabajando en un mismo lugar nos suena hasta arcaico.
La década del '80 fue de de codicia y ambición. Me enseñaron que de adulto debía tener un auto deportivo y una casa o departamento en buena zona. Al conseguir mi primer empleo, adivinen qué pasaba: tenía un sueldo de mierda y todo estaba carísimo; no se podía tener ninguna de esas cosas que se me había enseñado que debía conseguir a base de esfuerzo.
¿Y los X cómo quedamos con todo eso hoy? Pues muy independientes, teníamos que ser independientes para poder sobrevivir. Soy pionero de la generación que vive vio por primera vez a los chavos irse a vivir a departamentos de soltero. Yo ya lo viví. Esa es la razón por la que fuimos tan problemáticos para nuestras familias durante toda la década del 90, porque los sistemas antiguos no funcionaban para nosotros, no nos servían. También nos deja increíblemente realistas, porque para nosotros las cosas no andaban bien.
Otra característica: la alienación del mundo, la sensación de ser inútiles y no valer nada. No es posible que el coeficiente intelectual de una generación entera pueda caer de la manera que cayó el nuestro; pero lo cierto es que nosotros sacábamos las notas más bajas de la historia: en matemáticas obteníamos los promedios más bajos del mundo. Parecíamos una generación de burros; pero recuerden que al principio mencioné que el hogar tradicional se estaba desarmando. Es sólo que el sistema de educación aún no lo había reconocido y no lo tomaba en cuenta como factor importante; no se daban cuenta de que no teníamos padres en casa para darnos tranquilidad y ayudarnos con las tareas escolares. O sea que las cosas habían cambiado en la sociedad pero la manera en que nos enseñaban aún no había cambiado. Lo cierto es que hubo mucha gente que opinó que éramos un poco lentos (y puede que hayan tenido razón).
Fuimos pioneros de una nueva definición de felicidad y éxito; las anteriores no nos servían. La idea de ser presidente de empresa y ganar millones a mí no me seduce. Detesto las responsabilidades y las discusiones con la gente. Insisto: nos criamos en tiempos de recesión económica, de modo que para nosotros, la idea de felicidad y de éxito es trabajar en lo más te gusta, que no necesariamente será lo que nos asegure el futuro. Vivimos sólo del presente.
Son pasos más pequeños los que damos nosotros en comparación con la generación anterior. En lo personal he estado muy a gusto en mis diferentes trabajos; a veces la gente se sorprende cuando digo que me encanta mi trabajo. Lo que ocurre es que mis esperanzas y mis sueños como X son un poco más pequeños que la generación anterior; también tengo grandes metas, pero siempre voy detrás de los que realmente se pueden alcanzar.
Soy parte de una generación de individualistas que rayan en el egoísmo. No voy a generalizar, pero con nosotros el matrimonio como meta de realización personal y base de la sociedad, llegó a su fin. Vi divorciarse a mis jefes, y la idea de que el matrimonio nomás no va conmigo, la tengo muy arraigada. En el mismo ámbito individualista, tengo también bien inculcada la idea del esfuerzo personal para hacerte de tus cosas sin pedirle nada a nadie, y eso lo veo claramente con mi hermano, que pertenece a la ''Generación Y''. Él a sus 25 años sigue estirando la mano para pedirlo que necesita, con toda la comodidad.
QUE ORGULLO SER TREINTAÑERO X.
Hablar de la generación X es hacerlo pensando en personas de entre 24 y 37 años. Ya no somos adolescentes, pero entramos en la categoría de ‘’adultos jóvenes’’. Soy parte de la primera generación que se crió con la ruptura verdadera del hogar tradicional. En la década del 70 al 80 el divorcio pasó a convertirse en una palabra cada vez más familiar ¿Eso qué implica? Pues entre otras cosas, que nuestros jefes nos dieron la llave de la puerta de casa desde pequeños; aparecieron los hogares uniparentales. Por primera vez dejaba de existir la idea de padre, madre, dos hijos, un perro, un gato y una cerca blanca rodeando el jardín. No las teníamos que arreglar solos. En mi caso, a mis padres sólo los veía unos minutos en la mañana y otros tantos en la noche. Tenían que trabajar de tiempo completo y mi abuela fue la que verdaderamente me crió. Sólo los fines de semana estaban disponibles mis viejos.
Crecí en un mundo decadente. He escuchado siempre cosas como éstas: Si comes alimentos grasosos, de adulto te dará cáncer; si vas a la playa, no te expongas a los mortíferos rayos UV. Ese enorme agujero en la capa de ozono nos iba a provocar cáncer de piel, pero aún no teníamos protector solar factor 30. El reciclaje no existía todavía. En todas partes se hacían cosas que dañaban el medio ambiente, y durante la década del 70 y principios de la del 80 la gente, de repente, comenzó a darse cuenta. Pero aún no había soluciones.
Crecí siempre con la amenaza de la muerte. Y no me hablaban de guerras mundiales, sino del peligro que acechaba en la calle, en la escuela, incluso en ni propia casa: Me enseñaron a no abrirle la puerta a ningún extraño; si vas a coger, cuidado con no ponerte condón, porque el embarazo no es el único peligro, también te puede dar SIDA; cuidado al cruzar la calle, fíjate antes a izquierda y derecha, y ya no juegues futbol en la calle con tus amigos, pues un auto puede pasar y atropellarte, o cuidado al caminar por ciertos lugares a ciertas horas, porque hay asaltantes. Miedo y amenazas por todos lados.
A los treintañeros se nos critica a veces por nuestra apatía y por no involucrarnos en hacer de éste un mejor mundo. Pero se equivocan, no es apatía, es sólo que en nuestro inconsciente los miedos a tantas amenazas se han quedado grabados, y pasamos demasiado tiempo tratando de manejarlos..
Soy parte de la última generación que jugó al avión, a los encantados o a las canicas, pero también fuimos los primeros en estrenar las nuevas tecnologías que hacían que te quedaras en tu cuarto a jugar en vez de salir a la calle: estrenamos el Atari y el Nintendo, y últimamente, hasta jugamos sin problemas el XBOX y el PlayStation.
Por desgracia soy parte también de la primera generación a la que no le fue mejor que a sus padres; A ellos les tocó la romántica época en la que el gobierno era la mejor opción para trabajar, que te daba buenas condiciones para vivir como clasemediero decente hasta tu jubilación. Eso permitía tener a los 30 años casa propia, auto de agencia, y sueldo decente. A los X obtener esas cosas se nos ha complicado mucho, y cuando lo logramos, muchas veces es a costa de contraer largas y pesadas deudas. Crecimos en medio de crisis económicas permanentes, así que aprendimos a esforzarnos porque nadie nos regalaba nada, ni los padres estaban en casa para ayudarnos. Crecí en la época del nomadismo laboral. Mi padre duró casi 20 años en una empresa, y 10 en otra. Para los X durar 5 años trabajando en un mismo lugar nos suena hasta arcaico.
La década del '80 fue de de codicia y ambición. Me enseñaron que de adulto debía tener un auto deportivo y una casa o departamento en buena zona. Al conseguir mi primer empleo, adivinen qué pasaba: tenía un sueldo de mierda y todo estaba carísimo; no se podía tener ninguna de esas cosas que se me había enseñado que debía conseguir a base de esfuerzo.
¿Y los X cómo quedamos con todo eso hoy? Pues muy independientes, teníamos que ser independientes para poder sobrevivir. Soy pionero de la generación que vive vio por primera vez a los chavos irse a vivir a departamentos de soltero. Yo ya lo viví. Esa es la razón por la que fuimos tan problemáticos para nuestras familias durante toda la década del 90, porque los sistemas antiguos no funcionaban para nosotros, no nos servían. También nos deja increíblemente realistas, porque para nosotros las cosas no andaban bien.
Otra característica: la alienación del mundo, la sensación de ser inútiles y no valer nada. No es posible que el coeficiente intelectual de una generación entera pueda caer de la manera que cayó el nuestro; pero lo cierto es que nosotros sacábamos las notas más bajas de la historia: en matemáticas obteníamos los promedios más bajos del mundo. Parecíamos una generación de burros; pero recuerden que al principio mencioné que el hogar tradicional se estaba desarmando. Es sólo que el sistema de educación aún no lo había reconocido y no lo tomaba en cuenta como factor importante; no se daban cuenta de que no teníamos padres en casa para darnos tranquilidad y ayudarnos con las tareas escolares. O sea que las cosas habían cambiado en la sociedad pero la manera en que nos enseñaban aún no había cambiado. Lo cierto es que hubo mucha gente que opinó que éramos un poco lentos (y puede que hayan tenido razón).
Fuimos pioneros de una nueva definición de felicidad y éxito; las anteriores no nos servían. La idea de ser presidente de empresa y ganar millones a mí no me seduce. Detesto las responsabilidades y las discusiones con la gente. Insisto: nos criamos en tiempos de recesión económica, de modo que para nosotros, la idea de felicidad y de éxito es trabajar en lo más te gusta, que no necesariamente será lo que nos asegure el futuro. Vivimos sólo del presente.
Son pasos más pequeños los que damos nosotros en comparación con la generación anterior. En lo personal he estado muy a gusto en mis diferentes trabajos; a veces la gente se sorprende cuando digo que me encanta mi trabajo. Lo que ocurre es que mis esperanzas y mis sueños como X son un poco más pequeños que la generación anterior; también tengo grandes metas, pero siempre voy detrás de los que realmente se pueden alcanzar.
Soy parte de una generación de individualistas que rayan en el egoísmo. No voy a generalizar, pero con nosotros el matrimonio como meta de realización personal y base de la sociedad, llegó a su fin. Vi divorciarse a mis jefes, y la idea de que el matrimonio nomás no va conmigo, la tengo muy arraigada. En el mismo ámbito individualista, tengo también bien inculcada la idea del esfuerzo personal para hacerte de tus cosas sin pedirle nada a nadie, y eso lo veo claramente con mi hermano, que pertenece a la ''Generación Y''. Él a sus 25 años sigue estirando la mano para pedirlo que necesita, con toda la comodidad.
QUE ORGULLO SER TREINTAÑERO X.
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