Mi infierno privado

ALICE IN CHAINS - Black Gives way to Blue
Virgin Recs. 2009

Tenía mucho miedo. Miedo de que el fantasma del dios Layne Staley no dejara de pasearse por la habitación al escuchar al disco, opacando la labor del nuevo vocalista William Duvall. Miedo de que mi banda favorita, la que me ha acompañado en tantos momentos agridulces, en tantos hundimientos depresivos, que me ha sacado del hoyo infinidad de veces, me decepcionara. Sería darle la razón a los detractores que alegan que este regreso es sólo para llenar la cuenta bancaria de los integrantes de la banda, y yo nunca creí eso. Afortunadamente me dieron la razón.


El muy esperado regreso de Alice in Chains, después de una ausencia de 14 años, largo lapso de tiempo en el que el grunge desapareció, en el que murió Layne Staley víctima de sus demonios adictivos, y en el que Jerry Cantrell se aventuró a una corta carrera en solitario de 2 álbums, con éxito relativo.

La primer duda por razones obvias, es quién será el reemplazo como frontman. Desde aproximadamente un año atrás, el afroamericano William Duvall se venía perfilando como el candidato más serio, habiéndose presentado Alice en distintos conciertos con vocalistas invitados como Phil Anselmo o James Hetfield. Al final, en lo que parecía una descomunal e ingrata labor - la de llenar el hueco de Staley- Duvall cumple, y cumple muy bien. Primera duda despejada.

La segunda duda y más importante ¿A qué van a sonar? ¿tratarán de revivir sus glorias noventeras, o buscarán adaptarse a los tiempos? ¿se escuchará algo nuevo, o sonará otra vez como los discos de solista de Jerry? La respuesta llega rápido con el primer corte, All Secrets Known, y con ese título profético arranca el disco, y me suena mucho a lo que acaba de hacer Steven Wilson en su disco ‘’Insurgentes’’. Melodía oscura, depresiva, melancólica. No suena a nada de lo que hacía Alice en los 90s. Muy buen comienzo. Es, como dice la primer estrofa de la canción, ‘’A new beginning’’.

El segundo track ya suena más familiar. Check My Brain, es uno de los sencillos que se desprenden del disco, y suena mucho al Degradation Trip, de hecho era una canción que Jerry ya tenía preparada desde hacía mucho. Un sonido con un gancho muy comercial, muy rockera, poderosa. Hasta ahora William Duvall nos demuestra que sabe lo que hace tras el micrófono, con esa técnica de usar la voz en layers como lo hacía Layne.

Last of my Kind es el tercer track, y para mí el mejor. No la eligieron como sencillo, pero es puro metal, con un coro potentísimo. La que sigue es la primer balada acústica del disco, Your Decision, un tema en el estilo que ya les conocemos de sus discos Jar of Flies y SAP. Buena letra, que habla de no dejarte nunca vencer cuando todo se ve negro delante de ti y no parece quedar esperanza. Es tu decisión seguir adelante o derrumbarte.

La siguiente, A Looking in a View, es la canción con la que se dio a conocer el disco hace un mes. Lenta, oscura, depresiva, con una duración de más de 7 minutos, otra vez con esos coros pesados y pegajosos. Excelente tema. Sigue otra balada acústica, When the Sun Rose Again, ya no tan buena como la anterior, pero igual se disfruta, y hasta tiene cierta influencia country, me atrevo a decir. Después otro tema lento, Acid Bubble, de los mejores del disco, con un inesperado cambio de ritmo al minuto 2:50. Vaya riff de guitarra y qué manera de pegarle a los tambores de Sean Kinney. Lesson Learned sigue con la línea más rápida y comercial de la banda, y a continuación Take Her Out nos muestra que el sonido 90s sigue ahí. Me recuerda a su tema clásico A’int Like That.

Cerramos el disco de manera muy relajada, con Private Hell, excelente power ballad semiacústica , y con Black Gives Way to Blue, con la sorpresiva colaboración de Elton John en el piano. Ambas sin problema alguno podrían haber entrado en Jar of Flies.

En resumen, un muy digno regreso de una de las bandas más representativas de aquel sonido de Seattle que parecía ya olvidado. Para muchos uno de los mejores discos del año, y que cumple con creces con la expectativa que generó, vale la pena darle una escuchada de principio a fin. Si has tenido un mal día, ésta es una buena terapia. Muy larga vida a la Alicia Encadenada.

Calif. 9