lunes, 23 de noviembre de 2009

En honor al Dios Baco y a Belial

En el mundo griego y romano, las bacanales eran fiestas en honor a Baco (dios mitológico romano del cual deriva el nombre bacanal) o Dioniso (dios mitológico griego), en las que se bebía sin medida. Las sacerdotisas organizadoras de la ceremonia se llamaban bacantes y el nombre ha quedado asociado a las orgías romanas.
Por su parte, Belial es una deidad demoníaca consagrada a la lujuria y a los placeres carnales. Se dice que es un demonio de aspecto agradable y que induce a todo tipo de pecado, especialmente relacionados con el sexo. Se le da el nombre también del "señor de la arrogancia" o "señor de orgullo".



La cita se agendó una semana antes, elegí el tercer turno,a  partir de las 8 de la  noche. Conforme transcurren los días, la balanza de indecisión no me deja en paz. ¿Estaré haciendo lo correcto? No lo sé ni me importa, y al fin llega el tan esperado viernes.
Y entonces esa muy familiar sensación de mariposas en el estómago. Antes de salir del trabajo, hay que pasar a orinar, porque los nervios podrían jugar una mala pasada. Llego al lugar de la reunión y no hay sitio para estacionar el auto, aumenta entonces la ansiedad ¿habrán empezado ya? voy retrasado.

Camino a la recepción y pregunto por el número de habitación. La cara de hastío del empleado me deja bien claro que la respuesta que me acaba de dar, ya la ha dado muchas veces a lo largo del día. Subo al elevador junto a otros 3 tipos ¿No es coincidencia, verdad? porque todos vamos al mismo lugar.

Nervios. Miedo. Ganas de huir. Vacío en el estómago.

Tocamos, nos abren la puerta y nos reciben como si las conociéramos de tiempo atrás. Me tranquilza darme cuenta que aún no ha empezado nada, y que somos los últimos en llegar. Nos estaban esperando. Somos 6 hombres y 6 mujeres.
¿Y ahora por dónde empezamos, qué sigue? una breve ronda de saludos, y algunos empiezan con la acción.
Caen las ropas, la adrenalina invade el cuerpo. Milagrosamente las molestas sensaciones producidas por los nervios, desaparecen.  El campo de visión se reduce entonces a una especie de túnel, donde sólo ''veo'' a las otras parejas, no las ''observo''. Se vuelven objetos inanimados, muebles. Aquí más te vale no pensar, bloquear la mente. Sólo hay que dejarse llevar y permitir que el cuerpo haga el resto. No hay consciencia del tiempo, estás en lo tuyo y lo que hacen los demás no te interesa.

Fin de la sesión. Continúa una charla agradable y una ronda de bebidas. Excelente trato, todos parecemos amigos que hemos hecho esto juntos infinidad de veces. Los conocidos demonios del pudor y la culpa han desaparecido, y son reemplazados por una cierta sensación de incredulidad. ¿Realmente fui yo el que hizo esto? ¿cómo lo logré? ¿cómo vencí el pudor y el pánico escénico? Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Dos personalidades  conviviendo dentro de mí, de las que hasta ahora no estaba consciente.

Vamos de regreso a casa, con la victoria personal y secreta a mis espaldas. Lo conseguí. Ahora no hay límites.



3 comentarios:

  1. Suena muy interesante, aunque mi pudor no me dejaría hacer algo así jajaja,
    Pero para todos ellos que lo han vivido, mis respetos y que bien por disfrutar su sexualidad al máximo ¡!!

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  2. hahahahahahahahahahaha y x eso hay mas maricones todavia D: xk si les follan x el culo a los heteros disfrutaran de su punto g y se convertiran a los bi o gay...

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  3. jajajaja quisiera hacer eso

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